Símbolo universal del peregrino. Representa la unión de los caminos hacia Santiago. Se porta en la mochila o el bordón y es emblema jacobeo. Se ganaba cuando se llegaba a Santiago, pues era el Molusco típico de la zona de Galicia, cuando el peregrino volvía a su casa lucia la concha, con ello se acreditaba el haber estado en Compostela, por ello al peregrino cuando retorna a su casa se le suele llamar Concheiro.